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lunes, 28 de abril de 2014

ELECTROCARDIOGRAMA, Alba Otero

ELECTROCARDIOGRAMA

   Y al fin, el pulsómetro dejó de sonar...


Alba Otero

4 comentarios:

  1. Antía Costoya Mahía29 de abril de 2014, 17:52

    Es un texto real; te das cuenta de cómo va pasando el tiempo.Parece una invitación para disfrutar cada minuto de la vida.

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  2. Este texto es muy bueno. Esto sucede a diario, aunque todos quisíeramos que no sucediera; es algo muy triste, aunque eso tiene que suceder porque de otro modo el mundo se acabaría. Todos queremos a los nuestros y no queremos que se mueran después de estar enfermo, ya que el pulsómetro significa que esa persona estaba hospitalizado y enfermo.

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  3. El texto muestra que una persona muere,y lo transmite de una forma muy fria y real como la vida misma. Es triste, pero desgraciadamente la gente muere todos los dias en salas de hospital, atendidas o no, solas y acompañadas.

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  4. Este pequeño relato nos hace pensar, a cada uno de una manera diferente.
    A mí me ha sugerido que la persona tenía una enfermedad, una enfermedadque le impedía ser persona. Cuando su pulsómetro dejó de sonar, al fin todos suspiraron.

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